DELIRIOS PATRIMONIALES: CONVERTIR LA GUERRA Y EL ODIO EN UN VALOR CULTURAL

 

Los patrimonialistas delirantes son aquellos que ensalzan la guerra y promueven las narrativas históricas que glorifican conflictos bélicos, los regímenes autoritarios, las ideologías supremacistas y los discursos de odio. En lugar de tratar el patrimonio y la historia como un espacio de memoria crítica y reflexión, estos actores buscan legitimar versiones sesgadas de la historia, exaltando la violencia, la violación, el pillaje y la opresión como “valores positivos”.

Estos patrimonialistas del odio presentan una visión manipulada de los procesos históricos, minimizando las atrocidades y justificándolas en nombre de la gloria militar o la "identidad cultural de Antofagasta”, ignoran los relatos de las víctimas y ocultan los impactos negativos de los conflictos en las sociedades regionales.

Así, estas acciones promovidas por el Gobernador Regional, fomentan las ideologías del desprecio, en lugar de promover la historia y la memoria como espacio de aprendizaje, ensalzando los discursos de exclusión, supremacismo, xenofobia y racismo. Dificultan el reconocimiento de la diversidad y profundizan la ruptura, acentúan la división en una sociedad intercultural y multinacional.

Apelamos a la ética y a la responsabilidad en la política, y apostar por la memoria crítica y sin militancias ni sesgos cognitivos.

No es posible que un gobierno progresista brinde los espacios para validar la enemistad desde una deslavada instancia de patrimonialización que poco aporta a los niños y oscurece la cultura de la paz, es más, la contamina.

Con esos patrimonios de la muerte y violencia armada se validan los microfascismos que aportan significativamente a los avances de la ultraderecha, que vuelven siempre al guion narrativo del “enemigo interno” que tanta muerte ha generado en Chile.

La guerra es siempre tragedia. Todas estas acciones, irremediablemente, se van al bolsillo de la ultraderecha, siempre, validando sus pulsiones de odio a través de estos grupos delirantes y militarófilos.